Las infecciones por Piscirickettsia salmonis se caracterizan por presentar una reacción inflamatoria crónica. La inflamación crónica es una inflamación de duración prolongada, en la cual la inflamación activa, destrucción tisular e intentos de reparación e suceden simultáneamente. Aunque puede seguir a la inflamación aguda, con frecuencia la inflamación crónica comienza insidiosamente, como de grado bajo, progreasando solapadamente, aveces como respuesta asintomática.
En infecciones con P. salmonis realizadas en condiciones controladas en Salmón del Atlántico (Salmo salar) utilizando la vía intraperitoneal es posible observar la formación de granulomas entre a partir del día 17 a 20 post inoculación.
Introducción
La inflamación crónica se produce por persistencia de la infección de Picirickettsia salmonis. La inflamación crónica se caracteriza por infiltración de células mononucleares, destrucción tisular e intentos de reparación del tejido dañado. La inflamación granulomatosa e un patrón distintivo de la reacción inflamatoria crónica caracterizada por acumulación focal de macrófago activados, que con frecuencia, dearrollan una apariencia semejante al epitelio, epiteloide (Kumar et al., 2006).
Granuloma: estructura y función
Los granulomas usualmente se presentan como múltiples infiltrados nodulares, discretos y bien definidos, consistentes de macrófagos o célula epiteloides, rodeados por un anillo de células mononucleares. Los granulomas hepáticos pueden ser encontrados en cualquier zona del parénquima hepático.
Entre las funciones atribuidas a la formación de granulomas se encuentran evitar la dieminación bacteriana, contención de la infección bacteriana a través de la secreción de moleculas de oxígeno y nitrógenos secretados por los linfocito activado por macrófago y restringiendo el daño del tejido de la reacción inflamatoria.
Imagen 1: Salmón del Atlántico (Salmo salar), afectado por un cuadro de Septicemia rickettsial salmonídea (Piscirickettia salmonis), hígado (H&E). La línea roja limita el borde de un granuloma en el parénquima hepático (hepatitis granulomatosa).
Imagen 2: Salmón del Atlántico (Salmo salar), afectado por un cuadro de Septicemia rickettsial salmonídea (Piscirickettia salmonis), hígado (H&E). La línea roja limita el borde de un granuloma en el parénquima hepático (hepatitis granulomatosa).
Imagen 3: Salmón del Atlántico (Salmo salar), afectado por un cuadro de Septicemia rickettsial salmonídea (Piscirickettia salmonis), hígado (H&E). La línea roja limita el borde de un granuloma en el parénquima hepático (hepatitis granulomatosa).
Imagen 4: Salmón del Atlántico (Salmo salar), afectado por un cuadro de Septicemia rickettsial salmonídea (Piscirickettia salmonis), hígado (H&E). La línea roja limita el borde de un granuloma en el parénquima hepático (hepatitis granulomatosa). A la derecha se puede obervar pequeña islas de hepatocitos.
Imagen 5: Salmón del Atlántico (Salmo salar), afectado por un cuadro de Septicemia rickettsial salmonídea (Piscirickettia salmonis), hígado (H&E). En el parénquima hepático esta siendo reemplazado por tejido inflamatorio crónico.
Imagen 6: Salmón del Atlántico (Salmo salar), afectado por un cuadro de Septicemia rickettsial salmonídea (Piscirickettia salmonis), hígado (H&E). Detalle de un granuloma. El tejido hepático ha sido completamente reemplazado por tejido inflamatorio. La flechas de color negro indican islas de hepatocitos embebidas en el tejido inflamatorio del granuloma.
Imagen 7: Salmón del Atlántico (Salmo salar), afectado por un cuadro de Septicemia rickettsial salmonídea (Piscirickettia salmonis), hígado (H&E). Detalle de un granuloma. El tejido hepático es reemplazado por tejido inflamatorio.
Imagen 8: Salmón del Atlántico (Salmo salar), afectado por un cuadro de Septicemia rickettsial salmonídea (Piscirickettia salmonis), hígado (H&E). Detalle de un granuloma. El tejido hepático es reemplazado por tejido inflamatorio. La flechas de color negro indican islas de hepatocitos embebidas en el tejido inflamatorio del granuloma, en este casos ademas se observa material amorfo eosinofílico consistente con fibrina.
Imagen 9: Salmón del Atlántico (Salmo salar), afectado por un cuadro de Septicemia rickettsial salmonídea (Piscirickettia salmonis), hígado (H&E). Detalle de un granuloma. El tejido hepático ha sido reemplazado por tejido inflamatorio, compueto por células epiteloides, mononucleares, macrófagos, células hepáticas necróticas y detritus celular.